Historia
4to año / ambas modalidades
ACTIVIDAD 2 / SEMANA 2
EL SISTEMA
CAPITALISTA
Objetivo:
- Aproximarse a la relación entre
proceso económico y avances tecnológicos como factores de cambios sociales en
el s. XIX.
ACTIVIDADES:
Lee los siguientes textos y luego relacionando con tus conocimientos anteriores responde las consignas y elabora un cuadro comparativo.
Lee los siguientes textos y luego relacionando con tus conocimientos anteriores responde las consignas y elabora un cuadro comparativo.
LA SOCIEDAD CAPITALISTA ANTES DE 1850
El siglo XVIII significó el final del proceso de transición del
feudalismo al capitalismo en Europa Occidental. Se produjeron cambios sociales,
económicos, políticos e ideológicos que transformaron profundamente la
organización social europea e iniciaron los tiempos del Capitalismo.
Ya desde los siglos XV y XVI la expansión europea hacia otros
continentes – África, América, Asia – había llevado a una economía mundo. Por
primera vez se incorporaban estos continentes a las rutas comerciales de
Europa. En lo político, desde los siglos XV y XVI se consolidaron Estados
centralizados modernos en Gran Bretaña, Francia y España. Pero este proceso no
ocurrió al mismo tiempo en todas las regiones de Europa. En Alemania e Italia y
otras regiones de Europa Oriental, por ejemplo, los Estados centralizados se
constituyeron más tardíamente, durante la segunda mitad del siglo XIX.
El desarrollo de nuevas actividades económicas y los cambios que se
estaban produciendo en la forma de organizar el trabajo rural y urbano,
pusieron en crisis el modo tradicional de dominación feudal en Europa
Occidental y sentaron las bases del poder económico, social y político de la Burguesía. El protagonismo de la
Burguesía creció incesantemente desde la
segunda mitad del siglo XVIII, época en la que tuvo lugar una doble revolución: una revolución económica – La Revolución Industrial – que se inició
en Inglaterra y que fue tal vez el proceso transformador más importante que
vivió la humanidad hasta ese momento, y una revolución social y política – La Revolución Francesa – que marcó el
principio del fin del antiguo régimen. Ambas revoluciones permitieron, en el
futuro, la consolidación de la nueva sociedad capitalista.
La Revolución Industrial dio origen a una nueva forma de organizar el
trabajo: el trabajo fabril; a un nuevo tipo de trabajador: el obrero
industrial; y a una nueva forma de organización económica – social: el
capitalismo. El Capitalismo surgió luego de una sucesión de grandes y profundos
cambios sociales y económicos que se produjeron en el campo y en las ciudades.
El trabajo asalariado se difundió en las ciudades en las que se desarrollaba la
industria y también en zonas rurales en las que la producción agropecuaria se
destinaba al mercado.
Sin duda el capitalismo significó para el hombre un camino de progreso,
pero al mismo tiempo llevó a la formación de una sociedad dividida en clases
sociales con intereses contrapuestos. El conflicto más profundo fue el que se
planteó entre la burguesía,
propietaria de los medios necesarios para la producción, como la industria, la
tierra, las herramientas, y los obreros,
que no disponían de bienes ni de tierras ni de herramientas, y que lo único que
podían hacer para subsistir era vender su fuerza de trabajo.
Hacia la primera mitad del siglo XIX, el Capitalismo se consolidó en
Europa Occidental y los cambios que había introducido la Revolución Industrial
se extendieron por otros países del continente europeo y los Estados Unidos. La
burguesía se consolidó como clase y fue protagonista de importantes
revoluciones – 1830, 1848 – e impuso al mundo
sus ideas, valores e instituciones de corte liberal. Pero este mundo burgués
fue también un mundo de fuertes conflictos sociales. Junto a la próspera
burguesía, en las ciudades el número de obreros organizados crecía cada vez
más: reclamaban por mejores condiciones de vida y mejores salarios. El progreso
y la miseria fueron las principales características de esta época.
¿QUÉ SIGNIFICA “CAPITALISMO”?
“El término designa el sistema socioeconómico caracterizado
fundamentalmente por la propiedad privada de los principales medios de
producción y la libertad reconocida a los individuos para realizar contratos
que regulen sus propios intereses.
Históricamente el capitalismo surgió en Europa Occidental como sistema
basado en la organización del trabajo libre asalariado, diferenciándose de
otros sistemas fundados en la utilización de mano de obra esclava o servil
(esclavismo, feudalismo)
Desde el punto de vista jurídico, el capitalismo descansa, pues, sobre
dos instituciones esenciales: el derecho de propiedad privada y la libertad de
contrato, incluida en este concepto la contratación del trabajo personal. En
general, la actividad económica está orientada hacia la rentabilidad u
obtención de beneficios por las empresas privadas en un régimen de libre
concurrencia, en el cual, al menos al principio, el Estado no interviene.
El elemento central del sistema es el mercado, ya que la finalidad de la
producción es el intercambio y no el consumo directo. Según la ley de oferta y
demanda, el mercado regula los precios y las retribuciones de todos los
factores que intervienen en el proceso de producción y distribución. La
competencia es el motor y el regulador de la actividad económica”.
Paz Gajardo, en Diccionario
de ciencias políticas y sociales; pág. 64 – 65.
NUEVOS TIPOS DE PRODUCCIÓN
El comienzo de la nueva fase económica se produjo a partir del
desarrollo de industrias basadas en el carbón, el hierro y el acero. Y hacia
fines del siglo XIX, se utilizaron nuevas formas de energía como el petróleo y
la electricidad. Desde 1870 se realizaron importantes descubrimientos
científicos y técnicos que, aplicados a la industria, dieron origen a profundos
cambios en la economía mundial.
Así como en la primera Revolución Industrial la industria textil del
algodón fue el motor del desarrollo, las industrias pesadas que utilizaban
hierro y carbón fueron los pilares básicos de la nueva etapa. La expansión de
la construcción de ferrocarriles desde 1850, es el principal ejemplo.
EL DESARROLLO DE LAS COMUNICACIONES
El desarrollo del ferrocarril significó una verdadera revolución en los
transportes, ya que integró nuevos mercados, facilitó las comunicaciones e
incentivó el crecimiento de aquellas industrias basadas en el hierro, el carbón
y el acero.
Las redes ferroviarias se extendieron por casi todo el mundo. En Europa
fueron complementarias a las grandes líneas de navegación internacional. En
regiones como Australia, América Latina y África unieron las zonas productoras
de materias primas con los grandes puertos, desde donde por vía marítima se
transportaba la producción a los países industrializados.
El transporte marítimo también tuvo importantes mejoras: se aplicó en
gran escala el uso del vapor y se construyeron grandes navíos que, junto al
desarrollo del ferrocarril, permitieron un mayor crecimiento del tráfico
comercial.
Entre 1850 y 1870 el comercio internacional creció en un 260%. La
revolución en las comunicaciones permitió reducir distancias y crear la idea de
que el mundo se “achicaba”.
En este sentido tuvo gran importancia también la difusión del telégrafo. En 1870 la red telegráfica unió a toda Europa, creció en Estados Unidos y alcanzó Oriente. Las consecuencias de este hecho repercutieron en todos los planos de la vida social. Por ejemplo, permitió a los empresarios conocer las cotizaciones de los valores de la Libra y del oro en todo el mundo. Además, los gobiernos y la población conocieron lo que ocurría en diferentes lugares del mundo al poco tiempo de sucedidos los hechos. Estos adelantos técnicos permitieron que el capitalismo penetrara en todas las regiones del planeta y transformara profundamente la vida de los hombres de fines del siglo XIX.
En este sentido tuvo gran importancia también la difusión del telégrafo. En 1870 la red telegráfica unió a toda Europa, creció en Estados Unidos y alcanzó Oriente. Las consecuencias de este hecho repercutieron en todos los planos de la vida social. Por ejemplo, permitió a los empresarios conocer las cotizaciones de los valores de la Libra y del oro en todo el mundo. Además, los gobiernos y la población conocieron lo que ocurría en diferentes lugares del mundo al poco tiempo de sucedidos los hechos. Estos adelantos técnicos permitieron que el capitalismo penetrara en todas las regiones del planeta y transformara profundamente la vida de los hombres de fines del siglo XIX.
“Historia Argentina y el Mundo Contemporáneo”. Edit. Aique. 1996.
España. Pág. 78 – 80 – 81.
CONSIGNAS:
- ¿Qué aspectos de
la Sociedad Capitalista hace referencia el texto?
- Realice un cuadro
comparativo entre las características de la burguesía capitalista y los
obreros.
- ¿Qué descripción
hace Paz Gajardo del sistema capitalista?
- ¿Cuáles fueron
los descubrimientos en cuanto a fuentes de energía se dio en la segunda revolución
industrial?
- ¿Cuál fue el medio de transporte más importante
para ésta época? Fundamenta tu respuesta.